miércoles, 8 de mayo de 2013

El porque de Raíces y Alas

Tengo 60 años, soy madre de dos hijos varones, el mayor de ellos es down.  He crecido como madre a la par de mis hijos, y hoy, cuando la vida me ha dejado la mayor de las experiencias,  quiero transmitir a padres, hermanos, tíos, amigos o cualquier persona que tenga cerca suyo a un niño con esta patología, mi experiencia desde el nacimiento de mi hijo.
No fue una idea mía, sino de  una sobrina  postiza,  esas familias que solemos armar no de sangre (que también la tengo y es de diez),  sino de afecto, amor puro.  Ella, me ha escuchado relatar lo que fue la estimulación  desde el primer día, y como profesional médica que es, me llevó a que escribiera este blog,  que en algún momento puede ser una guía  para padres que por ahí  desesperan  o no tienen la posibilidad de una estimuladora semanal para sus hijos con este síndrome. Quiero recalcar que es fundamental SIEMPRE, lo que diga el pediatra, neurólogo, terapista o profesional que atienda a vuestros hijos. Esta es solo mi experiencia y  deseosa que sirva de estímulo a quienes lo necesiten y con el consejo de: no bajar los brazos.
Gracias
María del Carmen Bravo